sábado, 6 de febrero de 2010

Elegí mal día para dejar de snifar pegamento

Mientras Alfonso Guerra clama por una especie de unión de psoe y pp por el estado de crisis, lo cual significa que hay que montar follón, dar una magnitud catastrófica a la crisis para que se vea que no es culpa de ellos, sino de los astros y la conjunción planetaria y así evitarse de paso toda oposición “que buenos son piden consenso” y así huir de toda responsabilidad, los de siempre siguen medrando, de una manera infame.

Pepiño, el de los palotes se ha “enfadado” con los controladores aéreos.Tan socorridos esa gente: desde que tengo recuerdos siempre se les culpa y de lo mismo: sus sueldos excesivos.

Lo que nadie dice es que el problema no es que haya oficios que se cobre mucho, sino otros en los que se cobra poco.

Excita el odio de la gente y la envidia: y le va a funcionar.

Con ese discurso excita la más baja pasión de la gente la envidia y el odio, y coloca a todo el mundo contra ellos “cobran demasiado” y ese es el único argumento para no valorar en absoluto lo que digan.

No ha hablado Pepiño, el de los palotes, de lo que cobran el y la Pajín, por delante, y por detrás.

De eso no se habla: ellos son la nomenklatura: el pp no dirá nada.

No hace falta ser un augur: ahora surgirán “empresas” de controladores aéreos que casualmente serán contratados por el ministerio de Pepiño, que casualmente serán de los amiguetes….que con un poco de suerte los controladores han alcanzado un nivel aceptable en algún juego de ordenador de simulador de vuelo. Y el gran Pepiño habrá “ahorrado” dinero en tiempos de crisis: y lo querrán vender así. Que desvergüenza.

Ya hemos vivido esa situación en España, con la llamada seguridad privada se hacen ejércitos de macarras y proliferan los robos organizados, y no es casual; lo de los porteros de discoteca con un “examen” ya es de chiste; desde que existe esa protección aumenta la delincuencia y además se degrada a los servicios de policía del estado;  no es casual ni algo que no sea un negocio planificado: la seguridad, y la provocación de la inseguridad.

Yo si hace esa ley, no volveré a subir a un avión en España.

Piénsenlo bien: y verán como aumentan las catástrofes aéreas.

A cada disparate le sucede otro mayor.

5 comentarios:

ZP Nunca Mais dijo...

Ya advertí hace unos cuantos días de la peligrosidad de Pepiño el de los palotes. Aunque tiene cara de tonto, realmente es tonto.
En el pp callados como putas, que para eso cobran.

Pablo Otero dijo...

La sospecha sobre lo que ocurrirá no es infundada, sin embargo la situación actual tampoco es deseable:

http://www.aviaciondigitalglobal.com/noticia.asp?NotId=11921&NotDesignId=4

Museros dijo...

Hay muchas situaciones que no son las ideales, pero los mismos de siempre las toman como excusa para perpetrar sus planes (si es que no las han causado o permitido ellos mismos, en primer lugar, cual bomberos pirómanos).

Ahora va a resultar que las cajas de ahorros tienen un agujero de decenas de miles de millones de euros (billones de pesetas) porque los controladores aéreos están bien remunerados.

Los robolucionarios siempre hacen lo mismo: cuando no hay más remedio que admitir que falta dinero de la caja (porque se lo han llevado ellos), proceden a señalar presuntos culpables para distraer y dirigir la ira y la frustración que ellos mismos han causado.

Museros dijo...

La envidia se debe, por un lado, a la falta de esperanza y a la obsesión por la igualdad (por abajo) inculcada por la robolución.

Cuando te sientes impotente para evitar que te roben, la reacción es recriminar su suerte a los que aún no se dejan robar tanto como tú.Igualmente, cuando no ves manera de salir de la mediocridad y la mala remuneración salarial, acabas haciendo de la necesidad virtud, y creyendo que la mediocridad ("igualdad") y la mala remuneración salarial son "deberes cívicos" (como los llaman ahora).

La robolución vuelve a los hombres similares a los demonios: cuando crees que sólo te espera el infierno (y para siempre), tu único consuelo es llevar allí cuantas más almas, mejor.

Conrad López dijo...

Pepiño es un incomprendido. Además, deberán ser controladores y controladoras, cuota para todo.